En Carlos Tejedor, en el oeste de la provincia de Buenos Aires, alentamos el cuidado del medio ambiente. Desde nuestra parte, el comercio de la venta de insumos agropecuarios, y con el productor hacemos hincapié en las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), como la utilización de los cultivos de servicios (CS).
Es el caso de la vicia villosa con trigo. Estas especies de cobertura antes del maíz tardío generan beneficios para el productor y para el medio ambiente. También el objetivo es tener un balance positivo de carbono para que el suelo vaya creciendo en materia orgánica y en nutrientes de forma constante.
Con la inclusión de cultivos de servicio en comparación con las rotaciones que no lo tienen el efecto positivo del estos cultivos en el control de malezas es notable, permitiendo reducir el impacto ambiental y el menor uso de productos fitosanitarios (menor uso de aplicación por año).
Los planteos con CS, que no pueden ser comercializados, han mostrado un costo extra que promedió los US$103,7/ha, pero vale destacar, que los ahorros en herbicidas y nutrición de los cultivos posteriores, más el aporte en rendimiento de los mismos, cubren ese costo sobradamente, y en muchos casos (dependiendo del rinde y el precio del maíz a cosecha) el margen de ganancia por hectárea es muy positivo.
Al respecto, ejemplificamos con el caso del establecimiento "Don Eustaquio". Al respecto, se consideraron: 1)antecesor soja-cultivo posterior del CS maíz tardío; 2)fecha de siembra del CS 13/05/2019 (al momento la napa freática en campo está a 2,3 metros de profundidad; 3)densidad, 20 kg semilla de vicia villosa más 20 kg de trigo; 4)fertilizante a la siembra, sin fertilizante; 4)barbecho al CS 2,5 litros de glifosato full más 0.5 lt de 2.4 D LV 89% más 40 cc/ha corrector de agua; 5)fecha de aplicación 18/05/2019, como preemergente.
La ausencia de labranza por sí misma reduce la emergencia de las malezas porque las semillas que requieren una breve exposición a la luz no son inducidas a germinar. Además, los residuos sobre la superficie del suelo pueden suprimir directamente la emergencia de las malezas.
Ventajas
Los cultivos de cobertura brindan, en primer lugar, un control de las malezas con las que conviven, por competencia de luz, agua y nutrientes, así como por efectos alelopáticos en algunos casos.
Luego, el grado de control de malezas proporcionado por los residuos de los cultivos de cobertura puede variar de acuerdo a las especies, la biomasa de los residuos y las especies de malezas. Pueden reducir la emergencia de las malezas hasta en un 90%. Las especies anuales de semillas pequeñas y con requerimientos de luz para su germinación son las más sensibles a los residuos superficiales mientras que las especies anuales de semillas grandes y las malezas perennes son relativamente insensibles a la misma. La supresión de las malezas declinará durante el curso de la estación a medida que se descomponen los residuos.
Con respecto a dónde aplicar este método, es replicable a cualquier área pero como condición, requiere probar la especie o mezcla de especies adecuada, medir el agua y ver el momento óptimo de corte de crecimiento del cultivo.
En conclusión vemos que con el uso de cultivos de servicio en la rotación a la idea de mejorar el sistema se suman otros beneficios como la supresión de malezas, la menor necesidad de utilización de productos fitosanitarios, el aumento de fertilidad de los suelos, por ende, de rinde de los cultivos y la disminución de aplicación de nutrientes nitrogenados.
El autor es director comercial de Agronomía Campos Verdes
Dante Garciandía
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