Música y booktubers, en una noche de euforia por las ventas

Como en las últimas ediciones de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, el primer sábado se festeja la Noche de la Feria, con entrada libre y conciertos populares desde las 20. Ayer, aunque el clima se mantuvo húmedo y con amago de lluvias durante toda la jornada, cientos de visitantes se acercaron al predio de la Rural para recorrer los stands, escuchar a sus autores favoritos, formar fila para esperar sus firmas y sumarse a la celebración organizada por la Fundación El Libro y Barcelona, ciudad invitada de honor, que se extendió hasta la medianoche.

En la pista central de la Rural, con el piso de arena todavía húmedo y el público ubicado en las gradas laterales y en una platea formada por sillas de plástico, la cantante catalana Silvia Pérez Cruz fue la atracción principal de la noche.

Ya desde temprano, antes de que se levantaran los molinetes para permitir el ingreso libre, algunos fans se acercaron a los alrededores de la pista central para escuchar el ensayo. Mate en mano o sentados en los bares al paso cercanos, grupos de jóvenes esperaron fuera del vallado para conseguir un lugar privilegiado cerca del escenario. Muchos salían de la Convención Blogger, que había empezado a las 18 en la Sala Julio Cortázar, del Pabellón Amarillo. Allí se reunieron los seguidores de la poeta española Sara Buho y los lectores de Antonio Santa Ana, autor del clásico juvenil Los ojos del perro siberiano, que participaron de entrevistas abiertas. En el marco del encuentro se entregaron los premios a los ganadores del concurso Blogger de la Feria: Julieta Ninno, por el blog Mi universo literario; Melisa Müller, por Perdida entre páginas y más; y Álvaro Garat, por Alvin books.

Además de Sara Buho, que reunió a sus fans en el Firmódromo, los autores más convocantes del día fueron el mexicano Benito Taibo, que dio charla y luego firmó ejemplares en el stand de Planeta, y Claudia Piñeiro, que también estuvo primero en sala y luego firmó largo rato ejemplares de su último libro, ¿Quién no?. Muy pacientes ambos, estamparon sus autógrafos y posaron sonrientes para las fotos. En el pasillo central del Pabellón Verde, donde se congregan las editoriales más grandes, se formaron largas filas de lectores para cada escritor. El viernes, en ese mismo sector, la cola de fanáticos del youtuber Robleis, autor de Aventura zombie, daba vueltas por los stands hasta afuera del Pabellón Verde, con padres e hijos bajo la llovizna.

Como en la Feria hay actividades para todos los gustos, ayer también hubo lugar para la poesía: el Festival Internacional, que empezó el viernes y termina mañana, reunió en la Sala Victoria Ocampo a poetas argentinos, españoles, uruguayos, peruanos, chilenos y cubanos, en lecturas y homenajes que continuaron hasta pasadas las once de la noche. En esa misma sala, Jorge Fernández Díaz conversó con Mariana Arias, en una entrevista abierta organizada por LA NACION. El auditorio estuvo colmado.

A partir de las 20, empezó a circular mucha gente por los pasillos de los pabellones, incluido el Ocre, donde se ubican los stands provinciales e institucionales. Se cruzaban los que habían llegado temprano para escuchar a sus autores preferidos y salían con algunas bolsas de compras con quienes llegaban recién para sumarse a la Noche de la Feria. Y hablando de compras, lo más llamativo del día se vio en el stand de Penguin: hombres y mujeres que compraron 4 o 5 ejemplares de Sinceramente, el libro de Cristina Fernández de Kirchner, a $ 599 cada uno. El día del lanzamiento se había agotado a los 15 minutos. Y en la mesa vacía, donde los vendedores esperaban la reposición, no estaba la cara ni el nombre de la expresidenta. Ayer, apareció un afiche con su retrato.

Sin dudas, es el libro más vendido de estos primeros días de la Feria. Fuentes oficiales de Penguin aseguran que las ventas arrancaron bien. "Por ahora, vamos un 10 por ciento arriba en unidades vendidas en comparación con los primeros días del año pasado", dijeron desde la oficina de prensa del grupo. Entre los autores más pedidos figuran también Florencia Bonelli, el Indio Solari, Samanta Schweblin, John Katzenbach, Magalí Tajes y Claudia Piñeiro. Del grupo Planeta, Darío Szeta, Daniel Rosetti, Gabriel Rolón y Luciana Peker.

En Riverside, Edhasa y el sello infantil La Brujita de Papel, las ventas de los primeros días fueron un poco mejor de lo que esperaban. Dicen que contribuyó la extensión de las jornadas profesionales hasta el viernes, cuando coincidieron los especialistas, libreros y docentes con el público general. En el stand de Riverside los libros más vendidos fueron Serotonina, de Houellebecq, seguido por La hermana menor, de Mariana Enríquez, y luego El nervio óptico, de María Gainza. En el stand que comparten Edhasa y La Brujita de Papel, los más vendidos fueron Diario de una bruja, de Mónica López, y la saga de Harry Potter. En Corregidor, la colección de Clarice Lispector es siempre la estrella de la Feria. Y en Prometeo aseguran que sigue el furor por los ensayos sobre feminismo de Rita Segato, que en el discurso inaugural contó que por estos días le ofrecen cambiar de editorial a otras más grandes. Pero ella sigue firme junto a sus primeros editores.