Políticos de la oposición vuelven a Bolivia tras el exilio de Evo
Los líderes acusaron ser víctimas de persecución política
LA NACIONLA PAZ.- El abrupto cambio de panorama en Bolivia con la renuncia de Evo Morales el 10 de noviembre pasado permitió el resurgimiento de viejos líderes de la política. Connotados miembros opositores comenzaron a retornar a la nación andina desde otros países en los que estaban asilados o refugiados desde hacía algunos años.
El poderoso exgobernador liberal del departamento de Tarija, ubicado en el extremo sur de Bolivia, Mario Cossio volvió ayer a su región, procedente de Paraguay, donde estaba asilado desde 2011.
El líder opositor alegó en su momento persecución política de parte del gobierno de Morales, aunque este lo acusó en la Justicia de corrupción administrativa en el ejercicio del cargo.
"Camino a mi Bolivia, tras 9 largos años de exilio por la dictadura de Evo Morales. ¡Gracias Paraguay tu amistad y tu maravillosa gente me dieron fuerzas para superar este desafío! Te llevaré en mi corazón, te extrañaré", escribió en su cuenta de Twitter el domingo.
"Vengo a ejercer mi libertad, a reencontrarme con mi patria, con mi pueblo, con mi familia, a disfrutar de la libertad", afirmó Cossio una vez en Tarija.
Otro gobernador, en este caso de Cochabamba, departamento del centro de la nación andina, Manfred Reyes Villa, también tiene prevista su vuelta a Bolivia el próximo mes, procedente de Estados Unidos, adelantó ayer Mauricio Muñoz, su vocero en el país.
"Entre el 11 y el 18 de enero él va estar de retorno en el país", afirmó Muñoz. Reyes Villa, un excapitán del Ejército, salió del país en 2009 y denunció también varios juicios políticos en su contra por los que en 2016 fue condenado a cinco años de cárcel debido a delitos como enriquecimiento ilícito.
Cossio y Reyes Villa formaron un fuerte núcleo opositor, junto al gobernador Rubén Costas, de Santa Cruz, y sus expares Ernesto Suárez, de Beni, en el nordeste, y Leopoldo Fernández, de Pando, en el norte.
Los que se quedaron
Paredes, Suárez y Fernández también soportaron juicios impulsados por el gobierno de Morales, quien dimitió el mes pasado en medio de una fuerte convulsión social por una cuestionada reelección, tras casi 14 años en el poder.
De hecho, Fernández recuperó la libertad la semana pasada, mientras Suárez batalla por juicios en curso.
Fernández cumplió detención preventiva en la cárcel de San Pedro de La Paz desde septiembre de 2008 hasta febrero de 2013, cuando se aceptó otorgarle detención domiciliaria por su delicado estado de salud. La medida le impedía abandonar la ciudad sede de gobierno.
Según sus adversarios, durante su gestión, Morales, quien se asiló primero en México, permaneció unos días en Cuba y luego solicitó la condición de refugio en la Argentina, persiguió a unos 1400 bolivianos que se fueron al exilio, principalmente a Brasil, por razones políticas.
LA NACIONTemas
Más leídas de El Mundo
Tenía 19 años cuando lo secuestraron. El hombre que fue encontrado vivo en el sótano de un vecino 26 años después de su desaparición
España. Sectas, intereses inmobiliarios y un obispo excomulgado: el intrigante caso de las monjas que reniegan de Francisco
¿Un nuevo Lula? El dirigente social de 41 años que puede convertirse en la próxima gran estrella de la izquierda en Brasil