La medida que tomó el Central para asegurar el traslado de la tasa alta y frenar la dolarización
El Banco Central (BCRA) incrementó hoy el límite de Letras de Liquidez (Leliq) en que los bancos que capten depósitos del público pueden estar invertidos, una medida con la que busca mejorar el mecanismo de trasmisión de las subas que valida a la tasa de referencia a lo que las entidades pagan por los plazos fijos.
Lo hizo mediante la comunicación "A" 6661, norma que, básicamente, eleva del 65% al 100% el techo de la posición que puedan tener en esos títulos que emite para regular la oferta monetaria, en relación al "promedio mensual de saldos diarios del total de los depósitos en pesos" que tengan y "el valor residual de las Obligaciones Negociables (ON)" emitidas hasta el 8 de febrero pasado.
Los analistas interpretan que la medida apunta a reducir la enorme brecha que se había abierto entre la tasa que el BCRA le paga a los bancos por las Leliq y la que las entidades pagan a sus depositantes, que se encuentra en 44,1% (promedio) para colocaciones mayores a $1 millón y en 38,7% para los plazos fijos menores a los $100.000, es decir, los típicamente minoristas.
El objetivo final es tratar de asegurar que quienes en la última parte del 2018 constituyeron plazos fijos (y en general los fueron renovando hasta aquí) no se tienten ahora con ir al dólar y reciban un mayor premio por mantenerse en pesos.
Producto del duro programa monetario y su contrapartida (la fenomenal caída del crédito) desde octubre del año pasado, cuando comenzó el nuevo esquema, la proporción de depósitos que los bancos destinan a invertir en Leliq se duplicó y ya supera el 38%, mientras el stock de esa deuda del BCRA rebasa el billón de pesos.
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