Maradona, la cultura laboral y el engaño
Diego Maradona se enojó: el subtítulo de su biopic, presentada esta semana en Cannes, lo describe como un héroe, un rebelde, un Dios, pero también como, se dijo, un tramposo ("hustle").
Ese sustantivo titula, además, una comedia en clave femenina (con la actriz Anne Hathaway) recientemente estrenada en el país como Maestras del engaño.
Curioso: hoy mismo, la "cultura hustle", por otra de sus acepciones (la de esforzarse hasta la híperactividad), abre un gran debate en los Estados Unidos: se trata del extremo compromiso laboral, promovido entre otros por la corporación WeWork. Entre la adicción laboral y la ambición, como señalaba The New York Times en un extenso informe, despierta tanto entusiasmo como críticas.
Acaso el diccionario urbano logre sintetizar la definición del verbo: tener coraje y autodeterminación hasta lograr un objetivo. "Hustle" define a la nueva cultura corporativa de "intrapreneurs" y, de paso, redime al Maradona deportista y campeón del mundo.