Casi idénticos
Mark y Scott Kelly, dos gemelos astronautas, ofrecían la oportunidad soñada para estudiar qué cambios se registran en el organismo tras una estancia prolongada en el espacio. En 2015, mientras Mark se quedaba en Tierra, Scott (el de la derecha) se despedía de su familia ante las cámaras para pasar un año en la Estación Espacial. Ahora, los estudios que permitieron compararlos se publicaron en la revista Science y proliferaron los titulares impactantes: algunos decían que los hermanos ya no coincidían genéticamente y otros, que Scott había regresado más joven. ¡Qué fantástico hubiera sido! Pero, lamentablemente, la verdad es más ramplona. Según el veredicto de la NASA, Mark y Scott siguen siendo tan gemelos como antes. Es más: solo el 7% de la expresión genética del ADN de Scott no volvió a los niveles previos a su viaje. Una variación en algunos cientos de genes que, según los investigadores, es mínima. Normalidad total.