Milagros y milagritos
Milagros nació hace 18 años con cinco meses de gestación, 600 gramos, parálisis cerebral y sordomudez.
Su madre dice que tenía el tamaño de un celular. Abrió por primera vez los ojos a los 21 días. Ya en edad escolar, le festejaban los cumpleaños en el colegio, el Instituto del Lenguaje y la Audición Córdoba, de esa provincia. Viendo lo que las fiestas provocaban en Milagros y en sus compañeros, a su madre, Verónica Yorio, se le ocurrió ampliarlas a otros colegios de enseñanza especial.
Se harían el Día del Niño. El primer año fueron 90 chicos, y el número se fue ampliando hasta llegar, este año, a 1700. No se trataba solo de pasarla bien, sino de convertirlas en un gran evento solidario. El fenómeno fue tal que se constituyó la Fundación Muchos Milagritos hacen un Milagro, destinada a promover la visibilización e inclusión de chicos con discapacidades. Lo que empezó simplemente apagando velitas es hoy una movida que involucra a gobiernos, instituciones y ONG, y hasta Marcelo Tinelli ha sumado su apoyo. La fiesta, que lleva 11 años, se hace siempre el jueves anterior al Día del Niño, para facilitar la participación de colegios de zonas marginales.
Verónica, una ingeniera en sistemas, cuenta esta historia y no deja de sonreír. Como Milagros.