Insoslayable
HOLTENSEN, ALEMANIA.- Son muchas las situaciones en las que miramos el árbol y no tenemos en cuenta el bosque. Esa estrechez de miras puede responder a la imposibilidad de romper el enfrascamiento en que nos hallamos y de ver más allá de lo que tenemos frente a los ojos. También puede representar lo insoportable que puede resultar descubrir que lo que vemos está sesgado y que la realidad es mucho más compleja de lo que somos capaces de aceptar. Aquí, un auto, de un colorado disruptor, recorre un camino de Holtensen en medio de un campo de verdes y marrones cuyos límites parecen trazados con regla. Quien o quienes viajan en su interior, absortos tal vez en la perfección del tapiz campestre, puede que no hayan advertido la presencia de este árbol frondoso y solitario que se impone como un mojón desafiante. O tal vez sí se percataron de su insoslayable existencia y tuvieron la invalorable capacidad de abarcar toda la escena.