La performance del agro será clave en las próximas elecciones
Esperamos que este año el PIB termine creciendo 1 % y la inflación podría alcanzar un valor de 39% entre diciembre de 2018 y 2019. Estos resultados son el producto de nuestro modelo econométrico, para lo cual hemos hecho muchas simulaciones simultáneas, y hemos elegido esta versión, que supone que se mantiene el actual programa económico, con un 60 % de probabilidades.
También tenemos la versión más probable de que gane la oposición con mayor intención de voto, esto sería en segunda vuelta del ballottage, con 40 % de probabilidades. Aquí caería el producto algo más de 2% y la inflación cercana al 60 %, con un fuerte aumento del tipo de cambio. Seguramente, en estas condiciones, el tipo de cambio tienda a devaluarse fuertemente y el mercado descuente con alta probabilidad un default de la deuda, aunque esto depende naturalmente, de quienes terminen siendo finalmente los principales candidatos. Este escenario se basa en la posibilidad de un triunfo del kirchnerismo a quienes las encuestas posicionan como el principal rival.
Pero de muy corto plazo, pensando en el recién iniciado cuarto trimestre, la performance del agro será la clave, tanto por su impacto sobre el crecimiento económico, como sobre el ingreso de divisas.
¿Cuáles son las perspectivas del agro para la cosecha que viene, dentro de este panorama macroeconómico? En la zona maicera, el precio de la hectárea está en 15.500 dólares, que es algo menor que los máximos logrados hace pocos años. El de la zona triguera se mantiene en 5800 dólares/ha, tampoco es el más alto de la serie. La zona de invernada está en los 7500 u$s/ha y finalmente el costo de la tierra para invernada se encuentra en 3.000 u$s/ha. Comparado con los precios de los productos en el mercado actual, los precios de la tierra han sufrido una cierta disminución en dólares.
Para los precios de la tierra y de los productos agrícolas y pecuarios hemos tomado la información de Márgenes Agropecuarios. Dado que la tierra está algo más baja que en los máximos, sería un buen momento para invertir, pero sujeto a las perceptivas políticas que respondan a la pregunta: ¿Quién será el ganador en las próximas elecciones de 2019?
Recordemos que la tierra en zona maicera en 1978 (hace 40 años) se ubicó en 1483 u$s/ha, la zona triguera en 740 u$s/ ha, la zona de invernada en 615 u$s/ha y la hectárea de cría se encontraba en 361 u$s/ha. En otras palabras, el valor de la hectárea por ejemplo de la zona maicera ha crecido en un 6,0 % anual en términos de dólares ajustados por la inflación de Estados Unidos. Este es el valor inmobiliario de la tierra, cuyo valor se refleja comúnmente en el precio del alquiler anual neto de este activo.
El total de producción de granos y oleaginosos para el año 2018/19 se estima alrededor de 134 millones de toneladas. Recordemos que el valor total de la producción de todos estos cultivos fue de 29,5 millones de toneladas en el año 1989, o sea que en 30 años (1989 vs. 2019) está creciendo en 4,5 veces en volúmenes, producto del incremento del rendimiento físico por hectárea. Esta realidad se explica por la transformación en la operación de "siembra directa" en lugar de arar la tierra como se hacía antes, con las nuevas semillas de gran rendimiento, con los nuevos pesticidas y herbicidas, con los nuevos fertilizantes, con los silo-bolsa, que permiten elegir el momento de la venta de los granos y oleaginosos.
En cuanto a la ganadería vacuna, los precios en dólares billete han crecido hasta 1.63 u$s/ kg vivo para el novillo, mucho mayores que los de diciembre de 2018 que eran de 1,15 u$s/kg, o sea han aumentado en dólares en solo tres meses en 40 %. Con respecto a diciembre de 2017(1,88 u$s/kg) aún son inferiores en un -15 %. Y este aumento ocurrió con un incremento de más del 100 % en la devaluación del billete dólar. La crisis de la carne, también se suma a la baja cosecha de granos de 2018, que fue más que compensada en este año.
En Uruguay, la vaca de rodeo general vale 650 u$s/animal y su valor promedio histórico se puede calcular en aproximadamente u$s 480 por animal. La mayoría de los empresarios ganaderos del sector argentino muchas veces toman como valor de referencia los valores de los vacunos en Uruguay.
Creemos que la recuperación muy amplia de la producción de la cosecha gruesa puede lograr cerca del 2 % o incluso algo más de aumento del PIB general del país. Por lo tanto, el agro va a generar una reactivación importante de las ciudades y poblaciones del interior del país y una buena predisposición para seguir con las mismas condiciones políticas, con algunos riesgos que tienen que ver con la necesaria reducción impositiva que hace falta para el agro y toda la economía, y esto va a ser deseable a partir del 2020 en adelante.
¿Cuándo va a ocurrir esta mejora de la actividad y esta baja de la inflación? La inflación va a ir aflojando a partir de mayo de 2019, con cifras que tenderán a alrededor de 2 % mensual. A partir de abril se verá claramente la mejora del PIB y para el momento de las elecciones, en el IV trimestre de 2019, el país estaría creciendo alrededor de 6 %, cuando en el I trimestre, o sea ene-feb-mar de 2019, la actividad está cayendo 6% anual. La diferencia de 12 puntos va a ser muy notoria para toda la población. Esperemos que así sea, para bien del país.
Se estima que los planes han aumentado un 46 % más los ajustes que ya habían tenido. Que los salarios van a tener incrementos importantes a partir de las paritarias de abril-mayo de 2019 y que los jubilados y pensionados tienen un ajuste básicamente por inflación que está decayendo y además que Brasil va a crecer un 2,1 % y que esto influye mucho en la industria argentina. Por todo esto, más la cosecha gruesa, el PIB del IV trimestre de 2019 crecerá, como hemos dicho, alrededor de 6 % cuando en el I trimestre cayó un 6 %. La diferencia será notoria para toda la población.