Este modelo continúa la línea de desarrollo deportivo de la pickup nacional con la incorporación de un motor V6 naftero y suspensiones especiales para el off-road
El emblema de Toyota en la Argentina es, sin duda, la pickup Hilux. Un orgullo para la fábrica de Zárate, que no termina en las líneas de producción: continúa en la ingeniería y el desarrollo. Porque, conocedora de la inmejorable base de la pickup fabricada en serie, muy emparentada con el trabajo y las aplicaciones laborales, Toyota Argentina saltó un escalón hacia lo deportivo y lo recreacional, aplicando el mismo espíritu que guía a sus equipos de competición en todo el planeta: la filosofía Gazoo Racing, que se afirma en el eslogan "empujar los límites para ser mejor".
Así surgió la Toyota Hilux Gazoo Racing Sport, una pickup que puso a trabajar a mucha gente en Zárate (y fuera de allí, incluyendo Japón) para lograr un vehículo que respondiera a las exigencias de los clientes que le pedían a sus vehículos un alto rendimiento en la montaña, el ripio, la tierra, la arena, el barro y en todo tipo de terreno off-road (y que también se comporta muy bien en el asfalto).
Aquella Hilux GRS 1, que manejamos en el Parque Temático de Villa Carlos Paz, donde se corrió una de las pruebas especiales del Rally de Argentina 2019, mostraba una dinámica estupenda, aunque mantenía el motor turbodiésel 2.8 L de todas las Hilux.
Aunque el éxito fue rotundo, los pasos de la marca japonesa están guiados por otra máxima: la mejora continua. De esta premisa nació la Hilux Gazoo Racing 2 con un cambio sustancial: la incorporación del motor 1GR naftero V6 4.0 L 24 válvulas VVT-i (doble regulación variable de las válvulas), que entrega una potencia de 238 CV a 5200 rpm y 376 Nm (38,3 kgm) a 3800 rpm de torque máximo, al que acompaña una caja de velocidades automática de 6 velocidades con función manual-secuencial con la selectora (sin levas al volante).
Ahora bien, ¿qué mejor lugar para manejar la Hilux GRS 2 V6 que aquel donde los ingenieros de Toyota más el múltiple campeón argentino de Rally, Gabriel Raies, probaron cada amortiguador, cada espiral y cada reglaje hasta seleccionar la puesta a punto definitiva? Uno de esos trayectos es la prueba especial del Rally de la Argentina que va desde Tanti a Los Gigantes, en las sierras cordobesas.
Allí, la Hilux GRS 2 naftera mostró una dinámica distinta que la de la GRS diésel, porque el motor es más chico (por lo que está corrido hacia atrás) y es liviano: toda la camioneta pesa 120 kg menos que la gasolera y es más potente, por lo que hay que tener al vehículo traccionando (4x4 en alta) para que la cola no se vaya de viaje en las curvas. De todas formas, aunque el ESP es permisivo, cuando debe entra en funcionamiento lo hace y acomoda a la camioneta. Nada mal porque toda la GRS 2 está desarrollada pensando en la experiencia de manejo de los usuarios.
De allí, también sus exclusivos resortes y amortiguadores monotubo Kayaba con una fina puesta a punto para que el conductor disfrute al máximo de la chata. Hasta las llantas de seis rayos fueron cuidadosamente testeadas, igual que los neumáticos Bridgestone 265/65 R17". Nada librado al azar.
Como se trató de una prueba off-road, quedan pendientes las pruebas más específicas de aceleración y consumo, pero acelera de 0 a 100 km/h en unos 9,5 s, mientras que el consumo en ruta a 120 km/h supera los 12 L/100 km (en sexta el motor gira a menos de 2000 rpm), por lo que en ciudad debe gastar bastante. Pero, hay que tener en claro que ahorrar nafta no es el objetivo de esta pickup. La velocidad máxima está limitada a 195 km/h.
De más está decir que la estética exterior e interior tiene detalles exclusivos. El equipamiento es full (el mismo de la Hilux SRX) al que agrega una cámara frontal sobre el parabrisas con diversas funciones: grabar al estilo live-action en calidad Full HD, trazar y medir la performance de conducción porque cuenta con cartografía de Google Maps, GPS y acelerómetro. La información de esta especie de dash cam se puede guardar en una tarjeta de memoria o compartirla vía wifi con smartphones, tablets u otros dispositivos.
En ese contexto de gran calidad de materiales y tecnología, cuenta con un amplio equipamiento de seguridad pasiva, que incluye 7 airbags (frontales, laterales, de cortina y de rodilla para el conductor) y anclajes Isofix para asientos de niños, que complementa a los elemento activos como el mencionado control de estabilidad (ESP), el de tracción activo (A-TRC), el asistente de arranque en pendiente, el bloqueo de diferencial trasero y los modos de conducción Eco y Power. Todo esto, lógicamente hay que pagarlo: el precio de la Hilux Gazoo Racing Sport 2 V6 es de $3.250.100.