Coronavirus: camas, respiradores y policías, la urgencia de los intendentes

Ante el avance de la pandemia de coronavirus, los objetivos son los mismos en el sur, el norte o el oeste del conurbano y no distinguen colores políticos. Los intendentes, que ayer tuvieron un cara a cara con el presidente Alberto Fernández para organizar el trabajo en la crisis, buscan conseguir más camas y más respiradores para sus distritos, a la vez que ajustar cada vez más los controles de seguridad para que se cumpla la cuarentena.

"Tenemos que dejar de mirar cuántas camas tiene cada uno, porque las camas de un distrito pueden servir para otro. Necesitamos subir la cantidad: varios de nosotros llevamos propuestas de hacerlo con polideportivos y hoteles. Me preocupa el control del aislamiento y lo socioeconómico", señaló a LA NACION el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela (Juntos por el Cambio).

Los respiradores son otra preocupación. "Salimos a alquilar respiradores. La provincia le compró toda la producción a la única fábrica nacional, que produce 100 por mes, y los va a distribuir. Tengo 20 y necesito unos 20 respiradores más", sostuvo a este diario Fernando Gray, intendente de Esteban Echeverría y vicepresidente del PJ bonaerense. "Estamos trabajando para internaciones leves en una escuela y en un inmueble que estamos alquilando. Se va a abrir el hospital del PAMI, actualmente cerrado, y compramos insumos", añadió.

"Lanús tiene hospitales provinciales, están bajando unos 40 respiradores. Propusimos sumar camas adicionales en clubes y algunos hoteles. Y vamos a necesitar nuevos médicos y enfermeros", resumió a LA NACION Néstor Grindetti, el intendente lanusense de Juntos por el Cambio.

El intendente de Almirante Brown, Mariano Cascallares (PJ), subrayó "la posibilidad de ampliación de servicios públicos y privados" en su distrito. "Hicimos un análisis para ampliar camas ventiladas e intermedias. Y empezamos el hospital modular al lado de la Unidad de Pronta Atención [UPA] de Longchamps", completó.

"Necesito ocho respiradores más, son difíciles de conseguir en este contexto pero los voy a comprar", señaló a este diario Julio Zamora (PJ), jefe comunal de Tigre. "Hicimos un centro de aislamiento de emergencias, que va a tener 500 camas y se pueden extender hasta 1000. Es para internaciones leves. Y tendremos un lugar para internaciones medias y complejas", añadió Zamora.

Según pudo saber LA NACION, del encuentro con el Presidente los intendentes se llevaron anuncios como el de un fondo rotativo para los municipios que se destinará a alimentos y productos de limpieza, y un plan de obras públicas para los distritos bonaerenses.

Camas y alimentación son los temas que resaltó Mayra Mendoza, intendenta de Quilmes. "Hace una semana conformamos el Comité de Emergencia. Planificamos la ampliación de la UPA de Bernal Oeste, donde contaremos con 80 nuevas camas, 25 para terapia intensiva. Es uno de los hospitales que construirá el Gobierno. Y articulamos con organizaciones sociales, la Iglesia y el Ejército para entregar 5000 raciones de comida", señaló Mendoza, que pertenece a La Cámpora.

Efectivos en las calles

"Estamos trabajando con la Policía y con Gendarmería. Tenemos controles en los ingresos y retenes en los que se hace control de temperatura y de autorización para circular", contó Cascallares. El cierre de accesos también se aplica en Lomas de Zamora y Ezeiza. Se trata de algunas avenidas y rotondas: la mayoría de los municipios están "pegados" entre sí, vereda con vereda. "Ayer [por anteayer] hubo 100 móviles recorriendo Lanús, tratando de convencer al vecino de que haga el aislamiento", sumó Grindetti.

El ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, dispuso que se mantengan "reservas estratégicas" de efectivos bonaerenses. "Entendemos que se necesita una reserva por los que se enferman con este virus, pero si no logramos de entrada que la gente entienda hay que ser más duros", consideraron cerca de un intendente a este diario.

"Ahora se centralizó un poco más [el mando de la policía]", resumieron allegados a otro líder municipal. "Les pagamos nafta y les damos guantes", recordaron en un despacho local.