Graves incidentes en la Copa Argentina: la violencia de los hinchas de Newell's empañó el triunfo de Villa Mitre
LA NACION
La hinchada de Newells generó incidentes y los bomberos arrojaron agua para calmarlos
A Newell's lo envuelve un manto negativo. Sin poder hacer pie en la Superliga (perdió sus últimos tres encuentros con Gimnasia, Talleres y River), este domingo quedó eliminado en los 32 avos de final de la Copa Argentina frente a Villa Mitre de Bahía Blanca por 2-1, en Santa Fe.
En la cancha de Unión, el partido terminó de la peor manera: con graves incidentes provocados por los hinchas del equipo rosarino, que cantaron contra sus propios jugadores: "Si nos ganan los de Mitre/ Los mandamos al hospital". Los bomberos les arrojaron agua y la policía intentó desalojar la popular, pero ante la falta de garantías, el árbitro Lucas Novelli dio por terminado el encuentro.
Lejos de imponer su jerarquía frente a un rival que milita en el Federal A, jugó en la zona 1 y marcha quinto sin posibilidad de ascenso, Newell's se llevó una nueva derrota. Así se sumó a la lista de equipos de primera división que se despiden en el estreno en la Copa Argentina, tal como sucedió con Vélez, Tigre, Rosario Central (el campeón defensor) y Aldosivi.
La cuarta derrota en fila detonó también el final del ciclo de Héctor Bidoglio como entrenador de Newell's. El DT no realizó declaraciones tras el partido, pero en la salida del estadio se anunció su renuncia, a causa de los discretos resultados. Aldo Duscher asoma como el director técnico interino para las dos fechas que faltan de la Superliga.
Cumplido el tiempo reglamentario, se disputaban los cinco minutos de alargue y la hinchada tomó el control del partido. Ya estaban subidos de tono los cantos de los seguidores leprosos, que les pedían más "actitud" a los jugadores, hasta que la situación se salió de control.
Los hinchas leprosos comenzaron a lanzar proyectiles al arco que defendía Villa Mitre. Primero fueron unos pocos y la policía pidió su detención. Pero lejos de hacerles caso, proyectiles, cantos agresivos, insultos y hasta el intento de invasión al campo de juego tomaron la escena . El partido fue momentáneamente suspendido, ya en tiempo de descuento.
#CopaArgentinaEnTyCSports ¡Hasta una mochila de inodoro! Sobre el final del partido los hinchas de Newell’s comenzaron a arrojar objetos al campo de juego y el partido se suspendió. Hay policías heridos. Villa Mitre de Bahía Blanca iba ganando 2 a 1 y se clasifica a 16avos. pic.twitter.com/AtVkhuu575&— TyC Sports (@TyCSports) 24 de marzo de 2019
Los hinchas lanzaron piedras, proyectiles y hasta dos mochilas de inodoro. Cortaron el alambrado y amenazaron con invadir el campo de juego. Además, rompieron los asientos de las tribunas, tiraron chapas y palos. Los oficiales de policía fueron escasos frente a los hinchas agresivos que quedaron como protagonistas. Incluso, un efectivo debió abandonar el estadio por un corte en su cabeza.
Los jugadores de Villa Mitre atinaron a festejar con sus pocos seguidores que aún seguían en la cancha, pero los incidentes nublaron su hazaña. El deporte nuevamente se vio invadido por las agresiones desde las tribunas. Una hazaña deportiva que debió ser gloria y festejo, se vuelve a opacar. No se aprende más.
En los 16avos de final, Villa Mitre se enfrentará con San Martín de San Juan, que viene de derrotar por 1-0 a Villa Dálmine.
El equipo bahiense sacó ventaja en el primer tiempo con los tantos de Carlos Herrera y Leonardo López, ambos de media distancia, mientras que Newell's solo dispuso de un disparo alto de Maximiliano Rodríguez por encima del travesaño.
El DT de Newell's, Héctor Bidoglio, dispuso cambios ofensivos para el segundo tiempo que modificaron la estrategia y actitud de su equipo, y a los pocos minutos Alexis Rodríguez consiguió el descuento en el peor momento de Villa Mitre. El equipo rosarino estuvo muy cerca del empate con una gran atajada de Facundo Tavolieri ante Alexis Rodríguez, y luego Héctor González evitó sobre la línea el gol del ingresado Mauro Formica.
El dominio de Newell's se diluyó, Villa Mitre recuperó las marcas y el orden, y dejó al conjunto rojinegro hundido en la decepción, mientras los hinchas perdían la paciencia y comenzaban los cantos de reprobación y los incidentes, que generaron la intervención de la policía local.
Se fundó en agosto de 1924 en un terreno baldío de Bahía Blanca de la comunidad siro-libanesa. Doce años más tarde, se mudó a lo que es su actual sede social y deportiva. En 1953 se inauguró el Estadio El Fortín, con una capacidad para 6000 espectadores.
Los colores del club en un primer momento fueron rojo, blanco y negro, pero finalmente se eligió el color verde (en lugar del rojo) en homenaje al pueblo palestino. En 1926, ya representando esos colores, el equipo de fútbol de Villa Mitre comenzó a participar en la Liga del Sur. Debió esperar hasta 1940 para coronarse por primera vez de la Primera División, y unos cuatro años más para levantar su segundo título del Torneo Provincia de Buenos Aires.
Luego vivieron un tiempo donde deambularon por la primera y segunda categoría del fútbol de la Liga del Sur. Hasta que en 1991 volvió a coronarse de la Liga e inició una campaña que lo llevó a ser tetracampeón (1991, 1992, 1993, y 1994). Fruto de su trabajo y crecimiento, en 1999 logró su primer ascenso a la B Nacional B, y en 2005 se consagró en el Torneo Argentino A. Desde ese año que no festeja un título y está asentado en el Federal A.
Por eso este triunfo lo festejaron con el alma. Se enfrentó en dos oportunidades ante equipos de la Superliga, ambos por la Copa Argentina, Rosario Central en 2016 -victoria 1-0 para los Canalla- y ante Newell's este domingo. La ilusión los abraza. El conjunto que dirige Carlos Mungo, llegó al Estadio de Unión de Santa Fe con la premisa del disfrute y la fiesta. Invadieron las gradas del estadio, alentaron sin parar y agitaron las banderas desde la popular como si fuese la final del mundo. Su final del mundo.
