Pases en picada: el peor enero en seis años debilita las cajas de los clubes argentinos
A una semana de que cierre el mercado de pases en Europa, la cosecha de los equipos argentinos está por debajo de lo esperado. Apenas 30 millones de dólares, una cifra que ubica al enero de 2020 como el peor de los últimos seis años. Hay que remontarse hasta 2014 para encontrar una facturación menor: diez millones de dólares.
La cifra obtenida por los equipos de la Superliga empeora si se la ubica en contexto. Una sola venta, la de Exequiel Palacios a Bayer Leverkusen (US$ 18,8 millones brutos) equivale a más del 50% de los ingresos de los equipos de la elite nacional. La del joven mediocampista millonario fue la única transferencia que rompió el molde. Un dato más: Flamengo, vencedor de River en la final de la Copa Libertadores 2019, vendió a su joven estrella, Reinier, en casi US$ 39 millones. Argentina compite con Brasil en cuanto a la cantidad de futbolistas exportados. Pero en precio, está visto, los brasileños sacan una abrumadora ventaja.
"Claramente la situación del dólar complica nuestro mercado, a excepción de alguna venta relevante como le tocó hacer a Banfield con Carranza", contó a LA NACION Oscar Tucker, vicepresidente primero de Banfield. La venta de Julián Carranza a Inter Miami, el equipo de David Beckham en la MLS estadounidense, estaba acordada desde el año pasado. Si bien el futbolista emigró ahora, no se tomó en cuenta a la hora de computar los ingresos concretados en este mes de enero. "Se hace muy difícil competir con cualquier país de Sudamérica y ni hablar de Europa. Cada vez va a costar más mantener a nuestras figuras", adelantó Tucker. Y reafirmó: "Este mercado fue particularmente muy flojo, con pocos movimientos que les sirvan realmente a los clubes".
En el caso de River, que pudo oxigenar su tesorería con la venta de Palacios, tampoco le alcanzó para terminar de equilibrar sus números: fuentes de la entidad de Núñez confirmaron que se pidió un préstamo sindicado con diferentes bancos por $400 millones para hacer frente a diferentes obligaciones en dólares. Entre ellas, cuotas de los pases del plantel profesional, como Lucas Pratto o Fabrizio Angileri. En este mercado, además, River confirmó la compra del pase de Jorge Carrascal al Karpaty de Ucrania (lo pagó 2,5 millones de euros).
Después de la transferencia de Palacios, y siempre de acuerdo con las cifras que compila el portal Transfermarkt, la segunda más importante para los clubes argentinos fue la de Nicolás Figal, quien fue vendido a Inter Miami en US$ 3 millones por la mitad del pase. El tercer escalón del podio le corresponde a Nicolás "Uvita" Fernández, quien dejó Defensa y Justicia por San Lorenzo. El Ciclón pagó cerca de dos millones de dólares por la mitad de su ficha. Se trata de una venta en el mercado interno, pero el Ciclón reinvirtió el dinero que le pagó Colo Colo por su capitán, Nicolás Blandi (1,1 millones de dólares) en otro goleador. Fernández comparte el tercer puesto de las mejores ventas con Miguel Barbieri, zaguero central, que dejó Rosario Central, donde estaba a préstamo y se fue a Xolos de Tijuana, de la primera división mexicana. A la Academia le quedaron 2 millones de dólares limpios.
¡Buena suerte! [R][R][R]@Barbierimigue seguirá su carrera deportiva en el @Xolos [R][R]https://t.co/woQXyuaRNg [R] pic.twitter.com/iQmSPyXa0v&— Racing Club [R] (@RacingClub) January 3, 2020
Si bien las ventas de futbolistas siempre se consideraron como "recursos extraordinarios" en los libros contables de los clubes de fútbol, los tesoreros esperan que se abran las ventanas de transferencias (diciembre-enero y junio-agosto) para poder acomodar los números con los ingresos en moneda extranjera. Este año, en un contexto inflacionario y con los costos fijos creciendo a un ritmo superior al 50% anual, esa recaudación fue pobre. Y buena parte de los clubes de la Superliga no recibió un solo dólar desde el exterior.
Esta floja cosecha hace que durante el próximo semestre tengan que redoblar los esfuerzos para contener sus gastos. "La mitad de los clubes de la Superliga tiene el 100% de sus contratos en pesos", le dijo a LA NACION Mariano Elizondo, presidente de la Superliga. Y agregó: "Hay una tendencia que va hacia renegociar esos contratos y renegociarlos con un dólar-tope o, directamente, en pesos". Elizondo no cree que la volatilidad del peso argentino conspire contra la llegada de figuras a la Superliga: "No veo un éxodo de jugadores ni menos figuras. El comportamiento es similar al de otros mercados. En los clubes hay negociaciones con los futbolistas para modificar los vínculos", afirmó.
La Superliga tiene instrumentos para que los clubes se ajusten el cinturón: una de ellas es la oferta de pasajes en avión a determinados lugares del país gracias a uno de los convenios de sponorización que tiene el torneo. La devaluación de la moneda, la recesión económica y la altísima inflación fueron tres de los motivos que llevaron a los clubes a modificar el reglamento de la Superliga: a partir de ahora es bastante más laxo y no prevé quita de puntos ante el primer incumplimiento.
Igualmente, los clubes insisten en que necesitan más recursos para poder competir. Un mercado de transferencias escaso los obliga a buscar nuevas formas de financiamiento. O mejorar las que ya tienen. Por eso, ahora apuntan a aumentar el contrato de televisión.
Préstamos para todos
En tiempos en los que los billetes escasean, los clubes acuden a todas las herramientas que les permitan potenciar su plantel. Por eso, los dos mecanismos más utilizados para reforzarse por los clubes argentinos fueron las cesiones sin cargo y los contratos a jugadores libres. Según Transfermarkt, apenas 15 de los 285 pases que concretaron los clubes de la Superliga tuvieron dinero involucrado.
De acuerdo con el último reporte del sistema de transferencias de la FIFA (TMS), la cantidad de transferencias realizadas por los clubes argentinos decreció en 2019 en relación al año anterior. Los clubes nacionales cerraron 107 pases, un 2,7% menos que en 2018. Brasil, líder mundial, subió un 21,9% y concretó 306.